La reciente distribución del cuento infantil “Ariel es una niña”, impulsado por el Movilh y apoyado por distintas entidades del Estado, generó una fuerte reacción en el Congreso. El diputado de Renovación Nacional, Diego Schalper, expresó su molestia ante el patrocinio gubernamental del material, destinado a promover reflexiones sobre infancias trans en jardines infantiles, bibliotecas y establecimientos educacionales del país.
El proyecto contempla 5.000 ejemplares que serán repartidos en espacios educativos, lo que llevó al parlamentario a recordar las conclusiones de la comisión investigadora sobre terapias hormonales, que —según él— planteó reparos respecto de enfoques afirmativos de identidad de género. Para Schalper, resulta “increíble” que el Ministerio de Desarrollo Social, la Subsecretaría de la Niñez y la Defensoría de la Niñez respalden una publicación que, a su juicio, responde a una “ideología específica” y podría no respetar “el derecho de los padres a escoger la educación de sus hijos”.
Ante este escenario, el diputado ofició a la ministra Javiera Toro, a la subsecretaria Verónica Silva y al defensor de la Niñez, Anuar Quesille, solicitando antecedentes sobre la distribución del libro en establecimientos parvularios y de educación básica. Además, pidió precisar los recursos públicos eventualmente involucrados en el patrocinio del cuento. “Nuestra obligación es hacer exigible lo que concluyó la comisión investigadora y lo que establece la normativa”, afirmó.